Alfredo Castro, director y actor de teatro chileno y la destacada psicoanalista chilena fallecida recientemente, Francesca Lombardo, realizaron un fructífero trabajo conjunto, el que enlazó el teatro, la escritura y el psicoanálisis. Juntos abrieron posibilidades de diálogo que permiten reflexionar en temáticas fundamentales de lo humano como lo es el cuerpo, la muerte, la marginalidad y la mujer, entre otros. Estableciendo puentes provocadores y únicos.
«El proceso de Historia de la sangre, es que yo voy a tomar testimonio a Colina 1, al psiquiátrico en donde había criminales muy potentes, también con delirios, con enfermedades mentales. Y yo me empiezo a pasear por distintos lugares, que creo ahora no existen, y después yo trabajo dramatúrgicamente estos textos. Estos textos son trabajados con Francesca, conversados, cortados, pegados, expurgados. Y ahí yo le digo: “Francesca, tú tienes que escribir el texto de la Rosa Faúndez”, y ella escribe un texto espectacular que se estudia hasta el día de hoy, que todos los nuevos teatros lo hacen. Debo decir que Francesca hace una labor tan importante, porque hace que el mundo del teatro, a través mío y de los montajes, empiece por primera vez en la historia del teatro chileno a hablar de lo imaginario, del otro, de la otra escena, de real, de realidad, de lo simbólico. En fin, abre un mundo a la cultura que nunca nadie en Chile había hecho. Entonces la influencia de ella que será reconocida en el mundo del teatro y que yo me encargaré de reivindicar, que nunca nadie antes en Chile habló en esos términos de la puesta de escena».
Les invitamos a continuar con la experiencia de la lectura de esta provocadora entrevista realizada por Valery Dawson, contenida en el primer N° de la Revista Divergentes.
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